Isla de Skye, Escocia

Es jueves y tenemos un buen trecho, partimos de Luss en Loch Lommnond y nuestro destino es el punto más al norte de la isla de Skye, unas 183 millas, no podemos entretenernos mucho.

El primer café en Drover’s Inn, una taberna típica, muy antigua que está en la misma A82, aunque el ambiente es de una tras otra pinta al atardecer….

Nuestra siguiente parada ya es GlenCoe, llueve, cielo plomizo, pero no nos impide que paseemos por esa zona desértica

Continuamos ruta hasta Mallaig, un pequeño puerto pesquero activo y bullicioso donde parten ferrys para Skye y otras islas continuamente.

Junto al puerto hay tabernas y cafeterías que ofrecen seafood (mejillones, ahumados…)  y los platos típicos de la zona como coliflor con almendras al curry, Cullen Skink (una sopa con pescado ahumado, patatas..), FishMarket, una propuesta sencilla y sin pretensiones, pero una buena propuesta. 

El trayecto en ferry es corto y ameno, apenas 30 mn lo justo para buscar los rincones más fotogénicos del barco mientras nos persiguen una estela de graznidos de gaviotas y llegamos al puerto de Skye, Armadale, embarque y desembarque rapidisimos. 

La isla de Skye al noroeste de Escocia, es una caja de sorpresas que no hay que perderse bajo ningún concepto.   

A la izquierda vamos dejando los escarpados Cuillin Mountains, poderosos e impresionantes, pasamos rápido por el centro de la isla y nos dirigimos a Dunvegan, donde bruscamente la carretera casi desaparece y se convierte en un carril para un coche, para los dos sentidos!

Suerte que hay continuos passing places a escasos metros unos de otros y ahí te puedes apartar o dejar pasar. Rápidamente aprendemos las normas:  

 si el passing te queda a la izquierda  nos paramos en él, pero si nos queda al otro lado… también, para dejar pasar al otro vehículo. El vehículo con más visibilidad hace luces, para  y así no hay problemas.

Las señalizaciones van desapareciendo progresiva y totalmente, y para encontrar destinos es una aventura, pero así hacemos los primeros 15 km hasta llegar a  Neist Point Lighthouse,  el faro que hay que visitar si o si, dando un paseo de una hora de ida y vuelta, pero vale la pena. Lleno de ovejas con mucho equilibrio, algunas tan tranquilas en pleno precipicio.

Por cierto antes de dejar el coche cerca del faro, hay una pequeña y tierna granja con ovejas que se puede visitar, y ponen en un cartelito avisando cuando hay recién nacidas. .

Colbost, a pocos km del faro, es nuestro destino nocturno. Dormimos en un cottage más entre todos los que se encuentran dispersos en perfecta armonía con el paisaje, el mar, islas, ovejas, naturaleza, puesta de sol maravillosa, tienes la sensación de estar en el fin del mundo.  Nuestra casita, la ocupamos íntegramente, muy acogedora y agradable gracias a Patrice y Russell.  

Por la noche descubrimos otro cottage cerca y vamos andando a la luz de la luna, The three chimneys, y a sabiendas nos pegamos el fiesta del viaje. Una cocina elaborada y con pasión por el producto local, yendo un poco mas allá del haggys y los platos tradicionales escoceses.

vistazas desde nuestro cottage 

relax en nuestro cottage 

Nos  queda por descubrir la península de Trotternish en la parte noreste de Skye, por la mañana  nos dirigimos a Uig y desde allí tomamos un camino hacia Quiraing unas vistas sobrecogedoras, lunares y onduladas que invitan a pasear y a perderse.

Nos acercamos a la costa hasta Kilt Rock, en Elishader, unos acantilados rocosos de basalto y una cascada que se pueden ver desde unas terrazas construidas muy cerca, es una de las imágenes más conocidas de la isla, con aparcamiento para coches, etc.  

Unos kilómetros mas al sur intentamos llegar a Old Man of STORR, la famosa roca, pero la lluvia, que normalmente es fina y pasa rápido, esta vez es bastante fuerte y nos impide llegar, por lo que volvemos al coche, nos sin antes observar una cosa curiosa: las zonas enormes de árboles talados, hay que preguntar sobre ello. Nos dirigimos a Portree.

Portree, es un pueblo pesquero muy pintoresco en medio de la isla, es además con 2500 habitantes el pueblo de referencia y mas grande de Skye, las casitas del puerto pintadas de colores invita a entrar y pasear por el.

Es el punto de la isla más céntrico y con más oferta de b&b, comercios y restaurantes. 

Si entramos en la isla cogiendo el ferry Mallaig-Armadale, salimos en coche  por la A87 cruzando el puente Skye Bridge y enseguida damos con el Castillo de Eilean Donan.

Tras una curva aparece ésta vieja fortaleza y te deja sin habla, oscura y fantasmagórica, en medio del Loch Duich y sobre una pequeña isla, es fotogénico desde todos sus costados.